La resonancia magnética es una importante modalidad de examen para la prevención, el diagnóstico y el postratamiento de tumores. Gracias a este método, se pueden detectar y tratar en una fase temprana no sólo las alteraciones benignas, sino también las enfermedades malignas. En mi consulta de radiología, utilizo la imagen para aclarar cuestiones oncológicas.
El cáncer puede tener muchas causas. Las enfermedades previas, la predisposición genética, el estilo de vida y las influencias ambientales pueden desempeñar un papel en su desarrollo. El cáncer se caracteriza por la proliferación de tejido maligno. Esto significa que las células pueden crecer sin control y desplazar o destruir el tejido sano circundante. Además, presentan el riesgo de propagarse y extenderse en el cuerpo. Esto se denomina metástasis y, en el caso de ciertas entidades (p. ej. el linfoma), de manifestaciones.
Una de las tareas más importantes de la imagen es el diagnóstico de tumores y, en el mejor de los casos, la detección precoz de signos de una enfermedad maligna. En el caso del cáncer, la imagen oncológica con el diagnóstico del tumor y de la diseminación (estadificación) aporta una base óptima para la planificación individualizada de la terapia y, en caso necesario, para su seguimiento.
Imagen oncológica
Diagnóstico del cáncer con ayuda de la RMN
Imágenes oncológicas por RMN
La resonancia magnética también es importante para el diagnóstico del cáncer. Muchas cuestiones en oncología pueden aclararse específicamente con diagnósticos especiales de RMN.
Sin exposición a la radiación, los tejidos blandos, los órganos y la médula ósea se visualizan de forma muy diferenciada. Se pueden detectar muy bien, p. ej., los cambios tumorales en el cerebro y la médula espinal, el cáncer de mama, el cáncer de próstata y los pequeños tumores en el hígado y el páncreas. Uno de los puntos fuertes de la RMN suele ser la posibilidad de evaluar los bordes del tumor. En la compresión de la médula espinal, la RMN es la modalidad de imagen preferente.
Imágenes oncológicas por TC
Con la tomografía computarizada, puedo detectar de forma muy rápida y fiable la presencia de un tumor en la zona del cuerpo que se va a examinar o si hay indicios de propagación. Para ello, también pueden visualizarse regiones grandes y múltiples de forma completa en un examen.
La TC es especialmente adecuada para evaluar tumores en los pulmones y el abdomen. La TC tiene una alta especificidad en la detección de metástasis óseas. Las metástasis óseas son más frecuentes en el cáncer de riñón, bronquios, mama y próstata. La TC permite una evaluación de la estabilidad en la destrucción ósea metastásica extensa y también es útil para confirmar lesiones óseas detectadas por biopsia.
La imagen es importante para el seguimiento del cáncer
Seguimiento médico para una salud a largo plazo
Cuando se ha detectado y se ha tratado un cáncer con éxito, el seguimiento médico es esencial para detectar una posible recidiva lo antes posible.
Además de los exámenes físicos y las pruebas de laboratorio, el diagnóstico por imagen es una parte esencial del seguimiento médico. La elección del procedimiento y la planificación específica del examen se basa en la entidad del tumor y en la situación individual del paciente.